Los ciclos de la Luna constan de 28 días, durante los cuales, da una vuelta completa alrededor de la Tierra. Es importante conocer cómo nos afecta la luna para no vernos sorprendidos por cambios que no llegamos a comprender del todo. Nos influye en nuestra vitalidad, nuestra sensibilidad y nuestro estado de ánimo lo cual produce que nuestras relaciones con los demás se vean influenciadas por su poder.
La Luna afecta a la tierra con sus vibraciones específicas dependiendo de la fase en la que se encuentre. Recordemos que un ciclo se compone de cuatro fases: Luna nueva, Luna creciente, Luna llena y Luna menguante. Estos ciclos duran aproximadamente siete días y los cuatro completan el completan el mes lunar de 28 días. Los meses lunares por tanto son 13 y el inicio siempre será en Luna nueva.
Cómo nos afecta la luna
El tarot y la Luna
En el tarot el número 13 simboliza al arcano que representa la muerte. Debemos dejar a un lado lo terrenal y pensar en la muerte como el fin de un ciclo y la posibilidad de renacimiento que esto nos ofrece. Es época de cambios y evolución.
Podemos entonces afirmar que cada Luna nueva sería el momento de abrazar los cambios y renacer. Es importante prestar atención a la fase en que nos encontramos y saber cómo nos afecta la Luna.
Luna nueva
Como hemos comentado anteriormente, es el inicio de un nuevo ciclo. Es el momento de comenzar proyectos nuevos. Todo lo que nazca bajo esta Luna nos será favorable. Aunque es recomendable evitar la llamada Luna negra, que es ese punto en el cual la Luna no está visible.
En esta fase nos sentimos enérgicos. Es buen momento para la toma de decisiones importantes. También para ser creativos y planificar lo que queremos hacer en los siguientes 28 días. Es recomendable no estresarnos en este ciclo, ya que podemos intentar abarcar más de lo que podemos dada nuestra fuerte energía.
Es una buena época para iniciar un ayuno o una dieta depurativa.
Luna creciente
Es la fase de la luna se puede dividir en dos fases propias. Los primeros días se ve un trozo de Luna.
Esta fase nos anima a sociabilizar más y a tener contacto con otras personas. Es buena etapa para conocer a gente o unirte a alguna actividad nueva donde puedas conocer gente. El motivo es que todos estamos más receptivos.
También es un buen momento para abrir un negocio o pedir un préstamo. Y, sin duda, es el momento ideal para iniciar relaciones románticas.
Es una mala época para comer de forma abundante e iniciar cualquier tipo de dieta pues podemos caer en la tentación y darnos atracones.
La segunda fase de la Luna creciente comienza a partir del día siete. Es un momento idóneo para efectuar hechizos, pero siempre en la puesta de sol.
Luna llena
La Luna llena quizás sea la que más nos llama la atención ya que podemos contemplarla entera y luminosa gracias a los rayos solares. Es en esta fase cuando se concreta el éxito en todo lo que iniciamos en la Luna creciente.
También, es un buen momento para mantener conversaciones importantes y dar a conocer nuestra opinión y nuestros sentimientos sobre algo que no nos deja descansar tranquilos.
Es de sobra conocido que, durante esta fase, se producen multitud de nacimientos y es un momento ideal para las pedidas de mano.
La Luna llena suele ser reconocida por la gente sin falta de mirar al cielo pues es una etapa donde todo el mundo está exaltado, alegre y dicharachero. Los amantes pueden notar que la pasión se incrementa durante la Luna llena.
Luna menguante
Cuando la Luna está menguando, hay que tener cuidado con las relaciones, pues se vuelven frágiles. Es un tiempo de calma donde es mejor pensar las cosas y planear lo que se hará en la siguiente Luna.
Es, sin duda, la etapa ideal para recobrar energías y recuperarnos física y mentalmente del ajetreo de la Luna llena.
Ritual de la Luna llena
La Luna llena es el momento ideal para purificarnos. Para este hechizo, necesitamos estar a la luz de la Luna, una vela y algo que represente a aquello que queremos alejar.
Crea un altar y coloca el objeto en el centro, si no tienes un objeto puedes escribirlo en un trozo de papel.
Enciende unas cuentas velas para potenciar el hechizo.
Medita mirando a la Luna para entrar en un estado superior de conciencia, es importante para que el poder del hechizo sea mayor. Piensa en aquello que quieres alejar.
Cuando te sientas preparada recoge todo lo que has usado y vuelve a casa. Date un baño relajante a la luz de las velas para purificarte. Siente cómo te afecta la Luna positivamente para deshacerte de todo lo malo.
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